De Todo Bastante

Compartir mis impresiones sobre lo que pasa a mi alrededor.Si alguna vez logro instalar una sonrisa, una emoción o contribuyo a sembrar o cosechar una idea, sentiré que este espacio se carga de sentido. Este blog no tiene posición política partidaria, al igual que su autor. Por lo tanto, se publicarán textos con cualquier orientación al respecto, siempre y cuando los considere de interés para compartir.

Nombre: JTONIG
Ubicación: Ciudad de Buenos Aires, Argentina

Jorge A. Jaurena Nacimiento: 23/11/1949 en Buenos Aires, Argentina.

8.9.06

Manucho y su Duende, Dindi

El pintor argentino Miguel Ángel Guerreiro, nacido en Río Tercero y formado en la ciudad de Córdoba, reside en Madrid adonde llegó acompañando a Manuel Mujica Láinez en 1982. Artista de fuerte personalidad, transita una etapa figurativa en su pintura, en esta época en que la mayoría de sus colegas pinta abstracciones. Sus cuadros me transmiten una atmósfera teatral, onírica, que captura algo de la magia cosmopolita que brota de la literatura de su amigo y gran escritor argentino. Dueño de una personalidad que se tutea con el surrealismo; compañía indispensable a la hora del humor más frontal, inteligente, disparatado e histriónico, nos pasea en su paleta a modo de carruaje por paisajes, objetos, rostros y figuras humanas cargados de luces, sombras, colores y sugestión. Sus bodegones (naturalezas muertas), muestran una suntuosa gama de colores, brillos y texturas, donde géneros, maderas, frutos, vidrios y metales parecen despegarse de la tela y colocarse al alcance de la mano de quien los contempla. Sus retratos, algunos de ellos encargados por artistas de la talla de Charo López, Nati Mistral y Constantino Juri entre otros, parecen captar la esencia humana de los personajes a través del gesto, rodeados además de objetos íntimamente ligados a la vida del protagonista los que, a modo de escenografías, componen una imagen sutilmente dramática, de un realismo casi fotográfico. Entre lo mucho que atesoro de nuestra larga amistad, están algunas obras suyas que, desde las paredes de mi casa, todavía me deleitan después de años de adquiridas. Si les seduce la idea de dar un paseo a sus ojos, visiten su sitio http://perso.wanadoo.es/maguerreiro donde podrán ver una pequeña parte de su importante obra de la que en la actualidad, solo hay unos pocos ejemplares en nuestro país, fuera de los pertenecientes a particulares. Su alter ego Dindi, en cambio, reside en la novela "El escarabajo" de Manuel Mujica Láinez -a mi juicio una de las obras mayores del autor de la monumental Bomarzo- donde protagoniza parte del capítulo sexto. Estas dos identidades, profundamente humana una, mítica la otra, renacentistas ambas en su rica complejidad, me han obsequiado para compartir con ustedes esta humorada de Manucho, en relación con el más célebre (no entiendo por qué) y popular poema de José Martí. Según Dindi-Miguel Ángel Guerreiro, Manucho escribió la continuación del poema, luego que su nieto Diego se lo recitó cuando acababa de aprenderlo en el colegio. Era su costumbre, según relata Dindi, escribir estos pequeños poemas en broma en trozos de papel, que luego pasaban de mano en mano entre sus colegas de la redacción de La Nación, periódico del que era destacado colaborador. CULTIVO UNA ROSA BLANCA EN JUNIO COMO EN ENERO PARA EL AMIGO SINCERO QUE ME DA SU MANO FRANCA. Y PARA EL CRUEL QUE ME ARRANCA EL CORAZÓN CON QUE VIVO CARDO NI ORTIGA CULTIVO CULTIVO UNA ROSA BLANCA. (José Martí) AUNQUE ME MIRE CEÑUDO CARDO NI ORTIGA LE DOY Y SI LO HAGO ES PORQUE SOY FRANCAMENTE UN PELOTUDO. QUE ME GANE AL PUNTO Y BANCA QUE ME RETUERZA EL COGOTE NO IMPORTA SOY UN PAVOTE CULTIVO UNA ROSA BLANCA. ASÍ QUE SI POR AHÍ ME VEN CON LA ROSA AMIGA PERDÓNENME QUE LES DIGA: ME CAGO EN JOSÉ MARTÍ. (Manucho) He querido compartir, además del simpático e ingenioso texto inédito de Mujica Láinez, el conocimiento de este talentoso artista plástico argentino. Se me dirá, con cierta razón, que no soy objetivo. Les aseguro que tampoco soy exagerado. Abrazos para todos Jorge Jaurena Septiembre 2006

6.9.06

A la Pintura - de Rafael Alberti

A la Pintura
Tenías que ser tú, pintor,
de gracia liviana, música diluida,
luz vaporosa, frágil, desasida,
quien pintase en el aire puro, el aire de Aitana.
Pensativa inocencia, pintor,
de tu pintura voladora; pálida,
encantadora adolescencia;
color que de color se decolora.
Quién diría de tu alado pincel,
de tu paleta ala de mediodía
desnudada, bañada, tenue melancolía
flor secreta.....
¿Qué te daría yo para ti?
¿Qué te diera pintor como homenaje?
Una paloma que al volar se fuera
convirtiendo en pañuelo del paisaje.
Un pez ensimismado
y un caballo de espuma más ligera,
que un do re mi fa sol evaporado.
Tenías que ser tú, pintor,
grácil, liviana, inasible armonía,
quien retratara un día con el aire
en el aire puro, el aire de Aitana.
Rafael Alberti
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Este poema lo escuché en voz de China Zorrilla de un video proyectado en la Fundación Soldi, cuando en Agosto pasado fuimos a visitar la Ciudad de Glew, en cuya parroquia de Santa Ana Raúl Soldi pintó los murales que la visten, en el lapso de veintitrés veranos que pasó en esa localidad, desde 1953 hasta 1976. En la misma localidad, por decisión del propio Soldi y su familia, se levanta un edificio en el solar de la que fuera la pequeña casa donde el pintor y su familia pasaban los veranos, que alberga las sesenta obras que conformaban su colección privada, y que hoy pertenecen a la Fundación Soldi, que también administra ese edificio. Como no conseguí el texto escrito del poema lo transcribí desde el video, escuchando la interpretación de China Zorrilla. Por lo tanto, es posible que la puntuación y la distribución de los versos no sea exacta. Desconocía el dato de que Rafael Alberti tenía vocación de pintor antes que de poeta. Desconocía también que Aitana es el nombre de su única hija. Descubrí ambas cosas durante mi encarnizada búsqueda de este poema por internet.
El tiempo transcurrido entre los libros, nunca nos deja con las manos vacías. Jorge Jaurena Septiembre 2006

5.9.06

Gracias, amigas

No, no se sorprenda. No estoy por inaugurar un canal para la mujer por weblog. Es que mis amigas Alicia, Gabriela y Maria Inés fueron las primeras en estimularme a escribir. Betty Becerra me regaló, sin imaginarlo, el primer texto sobre el que trabajé el humor. María comparte los archivos que le mandan sus amigos, y me incluyó en su lista donde me reencontré con Betty. En definitiva, una cadena de circunstancias felices producidas en el territorio del afecto. Gracias, chicas, no saben el espacio de expresión que me pusieron delante de los ojos.
A mi amigo Jorge, que una vez me señaló que me ocupara de mis inquietudes intelectuales, a las que no siempre presto la debida atención. Y a tod@s porque de ustedes se nutre mi humor y mi amor.
Gabriela, no bien recibió la historia de "Aria para la Cuerda en Sol", se la mandó a sus amigos, y con el exceso de generosidad que la caracteriza me presentó ante ellos como un intelectual que no solo no está siempre triste, sino al que le gusta reir. Gaby y su esposo Hugo son los papás de Franco e Ignacio, dos sobrinitos del alma a los que todavía no he tenido oportunidad de abrazar, pero con los que, en cuanto pueda, voy a compartir el sol de Salta. Me falta mucho para ser un intelectual, pero a mi, lo que más me gusta, es reirme. Es por eso que ya son pocas cosas las que me tomo en serio, empezando por mi mismo que no soy una cosa, pero sí alguna especie de palimpsesto difícil de clasificar.
El que escribe, siempre abriga la esperanza de que alguien lea lo que produce. Por eso los weblog han creado un espacio invalorable para quienes no podemos editar un libro.
Algun@s de mis amigas y amigos no saben siquiera que existe algo llamado weblog; seguramente lo aprenderán ahora, si se les despiertan las ganas de asomarse a mis chapuceos. Este es un excelente medio de difusión de literatura, de ideas, de reflexiones y vivencias; es un espacio de comunicaciòn casi sin límites. Espero que me acompañen. Que cada tanto se asomen a ver qué noticias hay en la Gran Red sobre mis fantasías. Les espero a tod@s Jorge Jaurena Septiembre 2006
Nota: En todo cuanto pueda respetaré el lenguaje de género, reemplazando la "a" y la "o" por "@". Si algunas omisiones se producen sepan disculparlas, no soy escritor avezado como sí era Paganini avezado violinista. Si se me corta la cuerda del género de vez en cuando, no se enojen conmigo.....fundamentalmente las damas que en estos casos son las primeras "daminificadas".

Historia del Aria para la Cuerda en Sol (adivine cuales son mis comentarios)

ERA UNA VEZ un gran violinista llamado PAGANINI (dicen que el más grande de su tiempo y de los que se tenía memoria hasta entonces) Algunos decían que él era muy extraño. Otros, que era sobrenatural. (Otros que tenía un cocodrilo en el bolsillo, ya van a ver por qué). Las notas mágicas que salían de su violín tenían un sonido diferente, por eso nadie quería perder la oportunidad de ver su espectáculo (de escucharlo por mejor decir, porque verlo era bastante ingrato por cierto) Una noche, el escenario de un auditorio repleto de admiradores estaba preparado para recibirlo. La orquestra entró y fue aplaudida. El director fue ovacionado. Mas cuando la figura de Paganini surgió, triunfante, el público deliró. (Bueh, ya empezamos) Breves y semibreves (sic), fusas y semifusas, corcheas y semicorcheas parecían tener alas y volar con el toque de sus dedos encantados. Paganini coloca su violín en el hombro (ah, ¿todavía no había empezado a tocar?) y lo que se escuchó fue indescriptible (es que justo ese día le habían almidonado el saco, y raspaba un poco la madera, che: ¿qué iba a hacer el pobre?).De repente, un sonido extraño interrumpe el solaz (..?) de la platea. Una de las cuerdas del violín de Paganini se rompió. (Uhhh, ¡qué c.....ontrariedad, y el concierto recién empezaba!) El Director paró. La orquestra paró. El público paró (¿de qué paró el público? ¿de escuchar? ¡qué dominio del cuerpo tenía antes la gente!). Pero Paganini no paró. (Es que Nico, cuando tocaba ¡¡entraba en trance!! bah, por lo menos eso contaba su novia, según.leí). Mirando su partitura, continuó arrancando sonidos deliciosos de un violín con problemas. (Arranque, pero con cuidado Maeshtro, que solamente le quedan tres cuerdas porque ya arrancó una de entrada no más) Antes de que el público se serenara, otro sonido perturbador derrumbó (¿EEhh?) la atención de los asistentes. (NOOO, ni me lo digas, ¡no-lo-pue-do-cre-érr! Si como dicen, en ese tiempo las cuerdas se fabricaban de tripa, ¡a este pobre le tocó un cordero con gastroenterocolitis!) El Director y la orquesta, exaltados, comenzaron nuevamente a tocar. Otra cuerda del violín de Paganini se rompió. (¡¡NOOOOOOOOO!!) El Director paró nuevamente. La orquesta paró nuevamente. Paganini no paró. (Ufffa, loco, ¡qué embole! tocá mas despacio, macho!!) Como si nada hubiese sucedido, él olvidó las dificultades y avanzó sacando sonidos de lo imposible. (¡¡¡Estaba como poseído!!! ¿Ni cuenta se daba de que el violín se le quedaba pelado?) El Director y la orquesta, impresionados volvieron a tocar. Pero el público no podría imaginar lo que estaba por suceder. Todas las personas, atónitas, exclamaron “¡¡OHHH!!!” (¿ni un “AHHH”, todos al unísono: “OHHH”?...¡qué bien se llevaba la gente de antes!) Una tercera cuerda del violín de Paganini se rompió. El Director se paralizó. La orquesta paró....(¡¡fffff!!) La respiración del público se detuvo. Pero Paganini continuó. (¡¡Noo me digas que empezó a golpear el violín con el arco, tipo caja chayera!!...¡¡TEPEDÍQUENOMELODIJERAAASS!!) Como si fuese un contorsionista (EHH?) musical, arrancó todos los sonidos (los que pudo, supongo) de la única cuerda que quedaba en su violín casi destruido. Ninguna nota musical fue omitida. El Director se animó. La orquesta se motivó. (¿No sería una representación de Fausto lo que estaban viendo y se lo confundieron a Paganini, que se parecía bastaaante al Malo?) El público partió del silencio hacia la euforia, de la inercia hacia el delirio (estos suelen ser viajes de ida solamente). Paganini alcanza la gloria (es que se ve que consumía “de la buena”...... Y CONVIDABA AL DIRECTOR, A TODA LA ORQUESTA Y .......¡¡¡¡AL PÚBLICO!!!! ....él no se fijaba en gastos). Su nombre (tranquilícese, el suyo no señora, señor: el de Paganini) corre a través del tiempo. No es solamente un violinista genial. Es el símbolo del profesional que continúa adelante frente a lo imposible (y el público, chocho, mire, chocho con semejante despistado)
Moraleja de la Historia (mire si se la iba a perder!)
Yo no se el tipo de problemas que estás teniendo (¿Yooo? b..b..bueno, ayer domingo lavé ropa y se me cortó una cuerda del ténder...PERO ¡¡SEGUÍ TENDIENDO EN LAS QUE ME QUEDARON, para que vean!! Salvo eso, todo bien). Puede ser un problema personal, conyugal, familiar, (mmm no) no se lo que está afectando tu estima o tu desempeño profesional (la fiaca puede ser...). Pero una cosa si sé: (el paco es de terrorrr!!) no todo está perdido. Todavía existe una cuerda (¡ahorcate, hermano!) y es tocando con ella que ejercerás tu talento. Tocando con ella es que vibrarás. (Si: y averiguando quién era el dealer de Paganini. Porque yo nÚnca escuché ni leí una anécdota parecida). Aprende a aceptar que la vida siempre te dejará una última cuerda (salvo que te acuerdes de cambiar todo el encordado para el concierto, ¡marmota!) Cuando estés desanimado, nunca desistas (seguí tocando nomás, aunque el concierto te salga como el culo). Aún existirá la cuerda de la persistencia inteligente, del “intentar una vez más", del dar un paso más con un enfoque nuevo (y la posibilidad de que la próxima vez, no bien entres en el escenario, el público te tire con las butacas....en defensa propia) Despierta el Paganini (si, despertalo, que le cierran Promúsica) que existe dentro de ti y avanza para vencer (si, avanzá para la sucursal Florida y comprate un juego de cuerdas nuevo, papáaaaaa) Victoria es (¡¡UIA!! la mujer de mi primo Enrique) el arte de continuar donde los otros resuelven parar (pssé......bueh......) Cuando todo parezca desmoronarse, bríndate una oportunidad y continúa hacia adelante. Toca la cuerda (de ser posible, las cuatro cuerdas tocá, papanata) de la motivación y arráncale sonidos de resultados positivos. Pero antes pregúntate: ¿Quién motiva al motivador? (Adivina, adivinadorrrr) Esto es: ¿Quién motiva tu cerebro, qué motiva tu mano, qué toca tu violín? (¡el happy birthday! ¿qué querés que toque con una cuerda sola el paparulo: el uno de Brahams?) No te frustres, no te desesperes, recuerda: aún existe la última cuerda. (Cambiá todo el juego para la segunda parte del concierto y listo... ¡¡¡narigón, tarambanaaaa!!!) La cuerda del aprender de nuevo para deslumbrar y generar soluciones. (y la de colgarte de un árbol por huevón) Nunca la vida te romperá todas las cuerdas. (ayyy, qué larrrgo que es esto!!! ¿quién me mandará a mi?) Si los resultados están mal, es tu oportunidad de tocar la última cuerda (Y CUAL VOY A TOCAR SI ME QUEDÓ UNASOLAAAAAA???TARADOOO!GRRRRRR)..........
aelfuturoconinnovacióncontinua.Essiemprelacuerdaolvidadaquetedará
elmayorresultado.Perosiporacasoestuvierasenelfondodelpozoestaestu
oportunidaddetocarconlamejorcuerdadeluniversoCreerentí
(BLABLABLABLABLA, ya me puse de los nervios con esto de la cuerda). Jorge Jaurena Septiembre 2006